En este proceso, libera sustancias ácidas que paulatinamente perforan el esmalte de las piezas dentales y destruyen el tejido hasta que alcanzan su centro, la pulpa, donde están las terminales nerviosas. Cuando esto sucede, aparece el dolor dental característico de la caries.

Sin embargo, existen personas que, en la etapa inicial de la caries, también sienten dolor o una molestia especialmente al tomar alimentos y bebidas fríos y calientes.

Es importante observar que hay  factores que favorecen el desarrollo de caries como:

• Poca salivación
• Inadecuada higiene bucal
• Consumo exceso de alimentos ricos en azúcares refinados
• Estar sometido a tratamientos como la radiación
• Consumo de medicamentos diuréticos, antirreumáticos o antidepresivos
• Morderse las uñas (En ellas se esconden bacterias y, al morderlas, pueden pasar al diente y provocar el desarrollo de caries. Además, al intentar partir la uña con el diente el esmalte dental se puede romper).
• Encontrarse en la menopausia (en el caso de la mujer)

Remedios populares

Remedio para prevenir la caries #1 Verter en una taza de agua que esté hirviendo una cucharada de cola de caballo. Tapar y dejar refrescar.  Colar y tomar una taza al día. Este remedio es un remineralizante natural al contener sílice que previene la destrucción del hueso.

Remedio para prevenir la caries #2 Hervir, durante 5 minutos, 1 cucharada de castaña de Indias en una taza de agua.  Tomar 1 taza cada tercer día.  La castaña de indias contiene sustancias con acción limpiadora, pues estimulan la secreción de la saliva y tiene propiedades analgésicas.

Remedio para prevenir la caries #3 Comer a diario una manzana verde, ya que ésta neutraliza el medio ácido que favorece la aparición de caries.

Remedio para prevenir la caries #4 Consumir lentejas varias veces a la semana, ya que aportan hierro y calcio a los dientes de manera natural.

Remedio para prevenir la caries #5 Verter 1 cucharada de manzanilla en una taza de agua que esté hirviendo.  Tapar y dejar refrescar.  Realizar a diario buches con esta nfusión.  La manzanilla intensifica la producción de saliva reduciendo así la posibilidad de caries (si se tiene problemas de poca salivación) y, a la vez, inhibe la inflamación de las encías.

Remedio para prevenir la caries #6 Verter 1 cucharada de salvia y otra de tomillo en una taza de agua que esté hirviendo.

Tapar, colar y dejar refrescar.  Realizar gárgaras con esta infusión a diario tras el cepillado.

Remedio para prevenir la caries #7 Consumir queso con frecuencia como postre, ya que proporciona calcio y fosfatos que forman una auténtica barrera ante las bacte

Remedio para prevenir la caries #8 Hervir durante 5 minutos 1 cucharada de anís y otra de menta en una taza de agua.  Retirar del fuego después de ese tiempo y dejar refrescar.  Realizar buches con esta infusión

Remedio para prevenir la caries #9 Mezclar 1/4 de cucharadita de sal y una pizca de pimienta en polvo con un poco de agua hasta obtener una pasta.  Ésta se coloca sobre el cepillo de diente y se pasa como un dentrífico por todos los dientes.  Luego se enjuaga con abundante agua

Remedio para prevenir la caries #10 Agregar, varias veces por semana, cebada a las sopas o guisos. Los ingredientes de este tipo de cereal le reportarán un buen número de minerales y vitaminas que ayudan a fortalecer los dientes lo que evita, en cierta medida, las caries

Remedio para prevenir la caries #11 Hervir 1/2 cucharadita de salvia y 1/2 de menta en 1/2 vaso de agua por 5 minutos. Dejar reposar otros 5 minutos, filtrar y añadir 1 cucharada de sal rosa del Himalaya fina. Mezclar esta preparación con glicerina vegetal líquida hasta lograr un gel espeso.  Poner sobre el cepillo de diente, a modo de pasta, y cepillar toda la dentadura y las encías. Por último enjuagar

Remedio para prevenir la caries #12: Hervir, por 5 minutos, 1 cucharada de hojas de neem en 1 taza de agua.  Colar y, una vez fresca, realizar buches con esta infusión para fortalecer las encias y proteger contra las caries.

Recomendaciones

Adoptar una dieta que contenga pocos alimentos ricos en azúcares e hidratos de carbono, pero abundante en alimentos alcalino que contengan minerales orgánicos (como flúor, calcio, magnesio y sílice) y vitaminas del grupo A, B, y D. Los alimentos más alcalinos son las frutas maduras y todas las verduras y caldos alcalinizantes, como por ejemplo el resultado de la cocción de apio, cebolla, puerro y peladura gruesa de patata.

Tener cuidado con la ingesta de bebidas ácidas  Muchas bebidas como los jugos cítricos, zumo de tomate, vino, etc., contienen ácidos que reaccionan sobre el esmalte y lo "arrastran" lentamente lo que facilita la aparición de caries.  Para evitar esta situación, se recomienda no cepillar los dientes justo después de comerlos (esperar 15 minutos). Si no se espera, el ácido reacciona sobre el diente y "arrastra" aún más el esmalte con el cepillo.  Una opción es beber un vaso de leche (sin azúcar) antes del cepillado, que neutraliza la acidez.

Evitar deficiencias nutricionales en vitamina D, fósforo o calcio especialmente en los niños que se encuentran en su fase de crecimiento, ya que puede favorecer la aparición de dientes con esmalte y dentina de baja calidad.

Evitar alimentos muy duros, ya que al morderlos se puede caer los empastes.

Evitar, en el caso de los bebés, el uso prolongrado de biberón y la botellita con líquidos azucarados, etc.  En ese sentido, se debe evitar, también, impregnar el chupete con miel o azúcar.

Cepillarse después de cada comida, especialmente tras el desayuno (se comen más alimentos cariogénicos) y la cena (ya que durante el sueño hay poca salivación, lo que deja el camino libre a las bacterias).  No olvidar el cepillado de la lengua

Realizar un cepillado adecuado de los dientes Hay que llegar con el cepillo hasta las muelas, y limpiar su cara superior mediante pequeños círculos. No olvide la cara posterior de los dientes, la que no se ve..

Usar la seda o hilo dental a diario, pero hay que pasarla con cuidado, evitando romper la papila (el triángulo que se forma entre los dientes).

Cambiar el cepillo de diente cada tres meses.

Masticar chicle (sin azúcar) o, simplemente, enjuagarse la boca con agua en caso de que después de una comida no se puedan cepillar adecuadamente los dientes .

Evitar el uso de dentífricos abrasivos, ya que éstos contienen componentes que dañan los tejidos de los dientes. Lo mejor es usar los más suaves. En caso de duda, se debe consultar con el dentista.

Practicar técnicas de relajación, ya que el estrés puede, en algunas personas, propiciar no sólo la aparición de caries sino también de otras enfermedades periodontales como gingivitis y periodontitis.

Acudir cada 6 meses al dentista.